
Estaba lloviendo cerveza en un concierto en Moyobamba para celebrar el festival San Juan
“Va a ser full juerga,” me prometió mi amiga Pilar cuando me invitó a asistir el festival de San Juan en Moyobamba. Es un feriado para celebrar San Juan el Bautista, y acá en la selva la gente come “juanes” — el plato típico que es un símbolo de la cabeza decapitada de San Juan. Estuve el fin de semana pasado con Pilé y mi amiga americana Rachelle. Disfrutamos tres días divertidos lleno de comida, cervezas, y música.

Con el hacha para tumbar la umsha
Llegamos viernes en la noche y fuimos directamente a una fiesta de cumpleaños en la casa del hermano de Pilar. Después fuimos a la discoteca Boulevard 110 (que hace poco se llamaba “Kovashi”) donde nos quedamos hasta las 3 en la mañana.
Casi al final, la música cambió de cumbia y reggaetón a algo nuevo, y me vi bailando algo como la conga alrededor de un poste y tenia un hacha en mi mano. En ese momento no supe el significado pero lo descubrí el siguiente día. Esa noche no dormimos más de 3 horas porque nos levantamos tempranito en sábado para ir al centro y armar nuestra umsha.
La umsha, he aprendido, es la cosa más importante en el festival. Es un poste construido del tronco de la palmera, que esta decorado con regalos que están colgados. Durante una ceremonia en que la gente baila la pandilla – una danza grupal en una línea – las personas hacen turnos usando un hacha para tumbar el poste. Cuando se cae, hay una rebatiña para arrebatar los regalos. Me parece que es muy parecido a las piñatas en México… cruzado con el arból de Navidad!

Tomando jugos en el mercado
A las 7 de la mañana del día sábado nos reunimos cerca de las discotecas con un grupo de amigos de Pilar para preparar la umsha. Colgamos camisetas, gorras, pelotas, serpentinas de color, y en mayor parte, tangas y otros calzones. En nuestro primer intento, tratamos a poner la umsha en un hueco a la vera del camino. No funcionó bien porque era muy inestable, y casi destruimos algunos cables de luz. Por eso, alguien decidió para hacer un bache en el medio de la calle, y con unos palos, crearon el hueco sin preocupación para el impacto en el tráfico. ¡Aquí la fiesta tiene precedencia!

Primer intento para plantear la umsha
Luego, solo necesitamos pagar un señor viejo que vivía cerca para que vigile y protega la umsha de los ladrones. Él nos ofreció una botella con un trago misterioso y fuerte; por lo tanto, iniciamos la celebración con esta, antes de un desayuno en el mercado principal.
![]() Armando nuestra umsha en un hueco hicimos en la calle | ![]() Regalos y decoraciones en la umsha |
Avanzamos a la plaza central, donde estuvimos una umsha mucha más grande que nuestra. Pilar y sus compañeros del colegio participaron en un desfile, y todos bailamos la pandilla en una vuelta de la plaza.
Luego hicimos una fiesta privada en un bar en la esquina donde estuvo ubicada nuestra umsha. Había una parilla y mucho baile hasta las 3pm. Bailamos la pandilla y tumbamos nuestra umsha — se cayó muy fácilmente, y Rachelle ganó una gorra.
Después fuimos a un concierto con una banda que estaba tocando cumbia, salsa, y exitós de música pop. Aqui era “una barbaridad” (elogiable) dijo Pilar. La gente estaba bailando fuerte, a veces chocando intencionadamente. Había un abasto constante de cerveza, y con cada hora que pasaba, la gente estaba más energético y borracha. Nos quedamos muchas horas, y Pilar y sus amigos ganó el premio para grupo más parrandero. Y yo bailé como un gringo.
Sin parar, bailamos y tomamos desde las 9 en la mañana hasta medianoche. Al siguiente día me duelen los músculos que antes no los sabía existían. Inicialmente, tuvimos planes para despertarnos a las 4am para ir a la plaza, y luego bailar con los otros locos los 5 kilómetros hasta los baños termales para hacer el “baño bendito”. La costumbre es bailar la pandilla toda la ruta y luego meterse en el rio; muchas personas llevan vestidos típicos. De nuestro parte, estábamos demasiado cansados y dormimos hasta una hora más razonable.
Pasamos el día más tranquilo. Yo cociné un “brunch” para el grupo; miramos un partido del Euro 2012; y comimos los famosos “avispa” juanes acá. Prefiero esta versión (con chancho en vez de pollo, sin aceitunas, y con un toque del polvo “mixto” que consta de azafrán y otras cosas) más que la versión en Tarapoto. También comimos lo más rico tacacho con un ají increíble se llama mishquiucho.
Pero todavía había más fiesta. En la noche salí con Pilar y algunas de sus amigas a un concierto del grupo de Rioja bien conocido se llamado Los Cuervos y bailamos a unos “covers” de canciones populares. Por lo menos, no trasnochamos hasta muy tarde — después de comer salchipapa, regresamos a la casa antes de las 2am — temprano!
Finalmente, hoy día en la mañana visitamos los baños termales. Nos metimos en la poza que tiene agua de 43° C, y sentí increíble para mi cuerpo adolorido. Lo mejor será la oportunidad–por fin–para descansar bien esta noche!
esta es en espanol porque no quieres que tus padres sepan cuanto tiempo gastas ‘fiestando.’
y te encanta bailar con gringos.